Llegó a este mundo, con el siglo XX, el jueves 19 de marzo de 1900. Quedó en la historia grande del tango con su bandoneón, sus orquestas y sus composiciones. Se lo conoció con su apodo Balija. Se llamó José Servidio.
Debutó formando un trío junto a Raúl Iriarte y a Domingo Salerno.
Entre 1921 y 1922 lidera un cuarteto que completan Bernardo Gemino, Cesar Pizzella y José Tanga.
Formó parte de las orquestas de Roberto Firpo, Osvaldo Fresedo y Francisco Canaro, aunque en estas dos últimas no lo hizo por un tiempo demasiado prolongado.
Tocó junto a Anselmo Aieta, Carlos Marcucci, Pedro Maffia, Cayetano Puglisi, Alejandro Michetti, en diferentes conjuntos.
Musicó tangos en compañía de su hermano, como por ejemplo: EL BULÍN DE LA CALLE AYACUCHO; LA CARRETA; LA PENA DEL PAYADOR; MI CUARTITO y TRAPITO.
Dejó partituras firmadas de su exclusiva autoría como la de los tangos: EL ALMA QUE SIENTE; LA CHACARERA; PARA NEGROS SOLAMENTE; PUENTECITO y YO ME PRESENTO ASÍ.
Le puso música a las inspiraciones de poetas como: Celedonio Flores, Francisco García, Juan Andrés Caruso, Eduardo Escariz Méndez, Luis Caruso y Eugenio Cárdenas.
Es suyo, de letra y música, el tango YO ME PRESENTO ASÍ.
Sus habilidades con el bandoneón las paseó por lugares como: Armenoville, Pigalle, Paláis de Glace, Teatro El Nacional, Teatro Colón, Café ABC, Café La Puñalada y Radio El Mundo.
Su apodo Balija así con be larga, fue una ocurrencia de su padre. Cuando él era chico, por su baja estatura, transportaba el bandoneón casi arrastrándolo por el suelo y fue allí que su progenitor lo apodó así.
Falleció el viernes 6 de junio de 1969, injustamente olvidado pero imborrable en la memoria del tanguero de siempre e inmortal en sus letras y partituras.
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