Alberto Vacarezza nació el jueves 1 de abril de 1886, en la ciudad de Buenos Aires.
Autor de obras teatrales, sainetes y tangos memorables. También guionista de cine que llevó a la pantalla gigante todo su talento, con marcado éxito.
Su aporte en el séptimo es muy importante también. Fue guionista de los filmes: Lo que le pasó a Reynoso (1955), Pampa y cielo (1938), Murió el sargento Laprida (1937) y Viento Norte (1937). Argumentó la película Sendas cruzadas (1942). Fue autor de: Lo que le pasó a Reynoso (1955), Cuando un pobre se divierte (no estrenada comercialmente - 1951), El comisario de Tranco Largo (1942), Los apuros de Claudina (1938), El cabo Rivero (1938), Lo que le pasó a Reynoso (1937) El conventillo de la paloma (1936), Tu cuna fue un conventillo (1925). Aportó musicalmente para el largometraje La vida es un tango (1939).
Compuso los tangos: A MI MOROCHA; ADIÓS PARA SIEMPRE; ARACA, CORAZÓN; ATORRANTE; BOTINES VIEJOS, BOYERA; CALLE CORRIENTES; EL CARRERITO, EL PONCHO DEL AMOR; ERA UNA PAICA PAPUSA, FRANCESITA; IMPLORACIÓN; JULIÁN NAVARRO; LA COPA DEL OLVIDO; MALDONADO; MAMITA MÍA; MAÑANA JUEGA; MUSTAFÁ; NO LE DIGAS QUE LA QUIERO; NO ME TIRES CON LA TAPA DE LA OLLA; OTARIO QUE ANDAS PENANDO; PADRE NUESTRO; POBRE GRINGO; PICHU CANELA; PIM PAM PUM; POBRE GRINGO; TALÁN TALÁN; TU CUNA FUE UN CONVENTILLO, VIRGENCITA DEL TALAR y muchos más.
Escribió letras con profundo sentimiento del hombre del campo como: ADIÓS, QUE TE VAYA BIEN; JUEPA TORO y LA CHARLATANA.
A sus letras le pusieron música: Carlos Gardel, José Razzano, Antonio Scatasso, Enrique Delfino, Raúl Joaquín de los Hoyos, Juan de Dios Filiberto, Andrés Domenech, Tito Rossi, Rodolfo Sciammarella, Francisco Canaro, Mariano Mores, Juan Andrés Caruso, entre otros
Su estilo fue, quizás, grotesco pero no dejó de pintar la realidad de aquellos tiempos. Quién lee las obras de Vacarezza se transporta a aquellos momentos, en un viaje mental en el que es imposible no vislumbrar aquellas imágenes que se “pintan” desde lo escrito.
El jueves 6 de agosto de 1959 su vida, en este mundo, se apagó y pasó a la inmortalidad. Ya era un inolvidable.
Autor de obras teatrales, sainetes y tangos memorables. También guionista de cine que llevó a la pantalla gigante todo su talento, con marcado éxito.
Su aporte en el séptimo es muy importante también. Fue guionista de los filmes: Lo que le pasó a Reynoso (1955), Pampa y cielo (1938), Murió el sargento Laprida (1937) y Viento Norte (1937). Argumentó la película Sendas cruzadas (1942). Fue autor de: Lo que le pasó a Reynoso (1955), Cuando un pobre se divierte (no estrenada comercialmente - 1951), El comisario de Tranco Largo (1942), Los apuros de Claudina (1938), El cabo Rivero (1938), Lo que le pasó a Reynoso (1937) El conventillo de la paloma (1936), Tu cuna fue un conventillo (1925). Aportó musicalmente para el largometraje La vida es un tango (1939).
Compuso los tangos: A MI MOROCHA; ADIÓS PARA SIEMPRE; ARACA, CORAZÓN; ATORRANTE; BOTINES VIEJOS, BOYERA; CALLE CORRIENTES; EL CARRERITO, EL PONCHO DEL AMOR; ERA UNA PAICA PAPUSA, FRANCESITA; IMPLORACIÓN; JULIÁN NAVARRO; LA COPA DEL OLVIDO; MALDONADO; MAMITA MÍA; MAÑANA JUEGA; MUSTAFÁ; NO LE DIGAS QUE LA QUIERO; NO ME TIRES CON LA TAPA DE LA OLLA; OTARIO QUE ANDAS PENANDO; PADRE NUESTRO; POBRE GRINGO; PICHU CANELA; PIM PAM PUM; POBRE GRINGO; TALÁN TALÁN; TU CUNA FUE UN CONVENTILLO, VIRGENCITA DEL TALAR y muchos más.
Escribió letras con profundo sentimiento del hombre del campo como: ADIÓS, QUE TE VAYA BIEN; JUEPA TORO y LA CHARLATANA.
A sus letras le pusieron música: Carlos Gardel, José Razzano, Antonio Scatasso, Enrique Delfino, Raúl Joaquín de los Hoyos, Juan de Dios Filiberto, Andrés Domenech, Tito Rossi, Rodolfo Sciammarella, Francisco Canaro, Mariano Mores, Juan Andrés Caruso, entre otros
Su estilo fue, quizás, grotesco pero no dejó de pintar la realidad de aquellos tiempos. Quién lee las obras de Vacarezza se transporta a aquellos momentos, en un viaje mental en el que es imposible no vislumbrar aquellas imágenes que se “pintan” desde lo escrito.
El jueves 6 de agosto de 1959 su vida, en este mundo, se apagó y pasó a la inmortalidad. Ya era un inolvidable.
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